Se abrochó el cinturón de cuero, que su tío Sebastián, el curtidor, le regalase hacía ya cuatro años. Por suerte, su tío pensó en un regalo que le sirviese de por vida y, pese a haber aumentado considerablemente su talla, aún le seguían sobrando unos cuantos agujeros.
Se disponía a bajar la escalera de pie, hecha de madera de roble, que conducía a la planta baja ,cuando escuchó la voz susurrante de su madre.
"Martín, hijo, no olvides ordeñar a la vaca"
"Sí, madre, descuide, ya me ocupo".
Ahora sí, fue descendiendo peldaño a peldaño la escalera, a tientas, procurando no hacer ruido, hincando el pie en cada pezado de tronco y agarrándose bien a ambos estremos. Acostumbraba a levantarse antes que sus hermanos. Así pues, era capaz de bajar los quince toscos peldaños de la escalera, sin que apenas se oyese un leve crujido.
Madame, que bonito relato. Me alegra ver que me incorporo a tiempo de disfrutarlo, puesto que lleva usted poquito tiempo con el blog.
ResponderEliminarAguardo la continuacion.
Buenas noches
Bisous
ME GUSTAN LAS HISTORIA COSTUMBRISTA, ME GUSTA EL AMBIENTE LOGRADO EN ESTE ESCRITO, CARZUM, ESPERO EL DESENLACE.
ResponderEliminarMuchas gracias, Madame, son pequeñas cosas que escribo en función de la inspiración, ya sabe, pero, sí, espero poder continuarlo y me alegra que le haya gustado.
ResponderEliminarGracias, Abuela, nada comparado con sus cuentos y relatos... pero bueno, me ilusiona que le guste la ambientación.
Nos lo vas dando en pequeñas dosis,me gusta.
ResponderEliminarSaludos
Bueno, bueno, nos tienes en ascuas. Debes de producir un poco más rápido sino nos vas a matar. Promete
ResponderEliminarjo, cada vez este blog está más concurrido...si al final los pueblos tienen algo que no sé, como que gusta un montón...o será la autora del blog
ResponderEliminarbesotes
Gracias, Fosi... es una cuestión de tiempo y de inspiración, más que otra cosa, pero, agradezco enormemente vuestra paciencia.
ResponderEliminarJeje, lo intentaré, Marce, aunque ya sabes tú mejor que nadie que tiempo no me sobra...
Sí, bueno, personalmente espero que la gente se esté enganchando por lo que cuento...